miércoles, 27 de julio de 2011

Cielos de tabaco

He visto tu rostro con una extraña mueca de tristeza, he visto caer tus ojos en un pozo sin fondo, te he visto llorar en un pantano ya tus lagrimas vestir de luto como aquellos que no van a ningún funeral bañadas en aguas negras, he visto tus cejas rendidas y tus parpados caer de cansancio, has conquistado a la soledad de una manera sorprendente y ahora ella esta en ti como una garrapata del desierto succionando tu amor y ganas de vivir y la traición vuelve a respirar en tu nuca adolorida y con ganas de mas, ahora el dolor viste un rojo escarlata al igual que tus esperanzas y lagrimas

martes, 26 de julio de 2011

Alfileres, poemas y la ultima gota

he visto caer la ultima gota de tinto en la taza de porcelana y he visto tomar a mis dientes un color amarillo, he visto mis dedos muchas veces manchados por la tinta de cada poema que pedía a gritos su libertad y la saque de allí de algún lugar de las palabras para depositario en un papel y venderlo como un bizcocho cualquiera luego en librerías y bibliotecas, he visto la muerte a la cara, y he visto mi suicidio hace años he visto como caen por medio de arcadas las nubes a la tierra y levantarse y caminar, he visto un cigarrillo fumándose un pulmón enrollado en un pequeño tubo corroído por el oxido,lo he visto a usted lector como da vida en su rostro a un gesto extraño mientras leía lo del pulmón, he visto y leído este poema ahora dispongo a introducir un alfiler en mi pupila para no volver a verlo.

sábado, 23 de julio de 2011

¿Quien es Sebastian Zea ?

Supongamos que no existe un 22 de diciembre en 1990, supongamos que no existe sebastian Zea, supongamos que yo quite dicha fecha del calendario y mate a ese buen personaje hace varios años atras, pero también supongamos que el quiere vivir y salir del papel donde metí su cadáver, suponga querido lector que sea usted Sebastian Zea y me este buscando a mi, que he escrito esto que usted mientras seguramente habla conmigo esta leyendo apasionado, seguramente acompañado de un buen café y una canción que ya no se escucha en la radio, esperando tal vez una respuesta a su aburrimiento, suponga querido lector que usted este escribiendo esto mientras Sebastian Zea lo mira con detenimiento juzgándolo y corrigiendole, suponga usted querido lector que ni usted ni yo somos Sebastian Zea, dejemos a sebastian con las rosas muertas lejos de aquí, y vuelva a sus corneas, vuelva a sus pupilas y descanse, seguramente esta cansado, ahora suponga usted que no ha leído esto, que no sabe quien es Sebastian Zea, que no hay ningún libro en sus manos ni texto en sus ojos, suponga usted que esto no sucedió y mañana a la misma hora usted ve a sebastian Zea leyendo al lado suyo, entonces dígame usted, quien es sebastian Zea, usted, yo o sebastian Zea no existe. ¿ quien es ?
¿ quien es el curioso sujeto? y entonces atado a una imagen sin sentido llega a su baño regularmente el espejo encima del lavamanos, se bña la cara y levanta su cabeza y no reconoce la imagen en el espejo, un personaje jamas visto ¿ Es el Sebastian Zea ? .

sábado, 16 de julio de 2011

El tinto de los perdedores

Y entonces mi querido lector llegue al mismo viejo café con la mesera de la falda corta y la verruga que saluda a los clientes y le dije, ey ! chica he llegado yo, dame lo de siempre, me miro por encima de sus lentes rosados y grandes como montañas y me dijo; un café grande sin azúcar, verdad ?, asentí con la cabeza, seguidos tres minutos me senté con el café en una silla de esas rechinantes de madera corroída por el tiempo y los grandes traseros, saque mi libreta y mi bolígrafo rebotado en tinta y comencé a pensar, me dije a mi mismo debe ser algo con palabras, debe llevar las palabras, palabras, redondee mi idea cerca de cuarenta largos minutos con el café sin probar y dije ya esta, será en algún lugar de las palabras, me levante rápido de la silla esperando ovas y aclamaciones, pero nada, sencillamente nada y me dije a mi mismo, coño siempre pasa lo mismo, tome el café de un sorbo llame esta vez a la estúpida camarera de mala gana y le dije dame otro igual, y ella le dijo a la de atrás de la barra, si, lo mismo, otro tinto para aquel perdedor sin que yo la escuchase, pensé, la verdad me crees tan idiota, saque cuatro dolares del gabán los escupí y los tire en la mesa diciendo ahí tienes desgraciada comprale algo bonito a tus hijos yo me voy con mi idea
llegue a casa prendí el ordenador y escribí el tinto de los perdedores

miércoles, 13 de julio de 2011

Cuando me haya derramado en la locura, y caigan a manera de afluente torrente las palabras por mis oídos y sientas la vulnerables y burbujeantes frases de cada poema a manera de vomito en mi vientre sabras que he llegado a tu traicion, sabras de mi trabajo de en la prision, sabras que que tu tra

La verdad solemne

Sin recuerdos
sin resentimientos
sin sentimientos
sin venganzas
sin hambre en el alma
sin gente cuerda
sin ordenador
sin pluma
sin música
sin alma
sin corazón
sin dedos, cabeza y pies
sin ganas
sin esperanzas
finalmente habrás conquistado
la soledad...

lunes, 11 de julio de 2011

Suspiros

dame tu misterio en la noche, mientras insisto en mirar de reojo tu fotografía, dame tus palabras y tus calurosas despedidas que varias veces confundi con bienvenidas, dame una cuenta en un banco y guarda allí cada vez que pensaste la mirare en años y espero encuentre las mismas con intereses de sobra, cierra los ojos y vístete con la pijama que abrazo cada noche para no perder la silueta y tu recuerdo y ámame como siempre amare a la luna, a la poesia y a cada cabello que brota en tu cabeza como un roble sin dirección