De humos y palabras

El humo de cada cigarrillo empujaba el humo de su predecesor, los sentía bajar como tren sin frenos, como un Whisky en una helada, vivo amando con el cerebro anestesiado por mis lagrimas que brotan en contraria dirección, y por los puños flagelados de los incultos, cada paso sin sentido era una espina que arraigaba sus raíces en mis callosidades que me recuerdan, manchadas de tinta que ya no soy un niño, que los pasamanos son para el metrosexual y los columpios para los que van de adelante hacia atrás y le temen al salto, mis sueños son espejos de mi mismo y mis palabras bañadas de un gris matiz mis lagrimas de invierno, la televisión ofreciendo un reflejo de nuestra falta de cultura en una que otra paupérrima novela, los gritos, las palabras el lento transcurrir del tiempo son hoy el humo del cigarro que empuja el humo su predecesor....

La puerta cerrada

Vivo amando con anestesia en el cerebro
vivo en cada cicatriz de tu cuerpo muerto
vivo en cada uno de los cabellos muertos de tu cepillo
vivo en los espejos rotos
vivo en las suelas de tus zapatos agujereados
vivo en el stop de la música
vivo en las palabras del mudo
vivo en la nube gris
vivo en cada silencio de parejas enamoradas
vivo en el alba triste
vivo en la empolvada biblioteca
vivo en cada recuerdo senil
vivo en una casa de la mas fina madera con una sola ventana de cristal